Expertos ubican un trabajo deficiente en el empalme del viaducto elevado, justo en la zona donde pasa de tres a dos vigas metálicas
JONÁS LÓPEZ | 05:59 hrs.|Foto: David Solís| Excélsior| CIUDAD DE MÉXICO. Especialistas observaron defectos en la soldadura del empalme de una trabe con otra en el punto del colapso de la Línea 12.
Es en el punto donde el ancho del viaducto elevado se reduce de tres a dos trabes metálicas. El remanente de la tercera fue soldado sobre la que colapsó.
Mi apreciación personal –que coincide con la de mi hijo, que es egresado y con un master en estructuras en el MIT y que ha trabajado en varias empresas de ingeniería en Estados Unidos– es que se trata de una soldadura realizada in situ, con soldadura de electrodo recubierto tipo 6063, pero se nota que es una soldadura realizada en vertical descendente y, como llaman los soldadores de forma vulgar, cacahuatuda, es decir, con poca penetración, con cordón con muchas protuberancias. Es una soldadura, como dicen también los soldadores, para tapar el ojo al macho”, indicó Andrés De Antonio Simancas, exconstructor de bogies de trenes.
Alberto Gómez, ingeniero constructor, indicó que tanto la soldadura como la trabe de acero estuvieron sometidas a una gran tensión.
Aquí veo que se colapsó exactamente donde une la trabe tres a la trabe de en medio, donde reduce de tres a dos trabes. Tanto el acero como las soldaduras fallaron porque la tensión fue muy grande. Ya se estaba pandeando desde antes y no se le puso la atención debida. Al pandearse, el acero que está en el punto inferior de la viga es el que está sujeto a la máxima tensión”, compartió.
De Antonio Simancas alertó que la soldadura fue colocada en la zona media de la trabe, lo que no es recomendable e, incluso, en Estados Unidos está prohibido.
Pero aquí se ve que han unido dos tramos y justo en medio, en la parte media de la trabe, eso está terminantemente prohibido por el AISC, que es la American Institute Of Steel Construction”, indicó.
El empresario en retiro y exproveedor del Metro afirmó que como la soldadura fue instalada in situ, el soldador estuvo sometido a una posición incómoda para aplicarla, pues debió estar sobre un andamio a unos cinco metros de altura.
Esa trabe debería de haberse soldado con sistema MIG con protección del arco con argón o CO2 y además ser radiografiada, pero eso costaba mucho dinero. A muchos buenos soldadores no les gusta trabajar en un andamio y en alturas”, concluyó.